Un 'drone' es eso que equipara todos los mercados actualmente. Es una de las tecnologías más impactantes que ha conseguido captar la atención de los posibles consumidores.
Es un vehículo o aparato volador no tripulado y que puede ser manejado de forma remota. Permite además realizar fotografías y grabaciones durante el vuelo.
Tiene numerosas formas de uso y es por eso mismo que genera tantas controversias en la sociedad. No todos los usos que podemos hacer de ellos son peligrosos o relacionados con la actividad industrial, actualmente existen numerosos modelos económicos destinados al uso y disfrute de niños. Ahora bien, ¿son lícitos los drones?
El empleo de estos drones nos han dejado numerosos ejemplos que evidencian sus beneficios: "Chris Early afirma que emplea su drone para seguir a su hija de 8 años hasta el colegio y comprobar que no le ocurra nada". "La Mancomunidad de L'Alacantí usa drones contra el mosquito tigre". Como también daños: "un dron, a punto de chocar contra un avión en un aeropuerto de París" (Noticia El País) o "un dron, apunto de impactar sobre el líder de la Copa del Mundo".
Lo que está claro es que el mercado de estos drones acaba de despegar y se esperan grandes resultados de ellos. Haciendo un uso legítimo de esos se espera un claro beneficio reflejado en la sociedad. Deberá estudiarse profundamente la legislación para evitar usos ilícitos de ellos.
Sin duda, todo apunta a que nos encontramos frente a una posible dependencia de ellos en un futuro. Cabe pensar que se normalice su empleo y se conviertan en los nuevos dispositivos móviles, al alcance de todos.
Sandra Mª Vergara Valbuena.
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